miércoles, 29 de febrero de 2012

Un cursillo

-¿Y tú, José Luis, quieres a Carmen como legítima esposa?
-¿Perdón?
-¿Que si quieres a Carmen como legítima esposa?
-¿Es a mí?
-Sí, a ti, venga, responde, que los invitados están empezando a murmurar.
-Es que yo soy el fotógrafo.
-No te estoy preguntando por tu profesión. Te pregunto si quieres a Carmen, aquí presente, como legítima esposa.
-¿No debería hacerle esa pregunta al novio?
-No trates de escurrir el bulto, majete.
-¿Cómo?
-A ver, ¿has hecho los cursillos matrimoniales de la parroquia?
-Pues no sé. Hice un cursillo, sí, pero era de fotografía digital.
-Da igual, la cuestión es que has hecho los cursillos y estás junto a la novia delante del sacerdote, que soy yo. ¿La aceptas o no como esposa?
-No.
-¿Entonces para qué diantres te molestaste en hacer los cursillos de la parroquia?
-Para aprender a hacer buenos reportajes de boda.
-Valiente tontería. ¿Cómo vas a hacer reportajes de bodas si el primero que se niega a casarse eres tú?
-Yo ya estoy casado.
-Lo que me faltaba por escuchar.
-Hace tres años.
-Pues ahora te vas a volver a casar.
-Cásese usted.
-Yo hace años que hice un juramento.
-Pues yo lo voy a hacer ahora mismo y además usando el micrófono para que me oiga toda la iglesia. Démelo, démelo…

2 comentarios:

  1. Muy bueno! El 14 de abril se casa la hija de un primo hermano y él, de profesión, es fotógrafo.
    Se lo remito ya mismo.

    (Un abrazo, familia Royo/Berges)

    ResponderEliminar
  2. muy divertido como acostumbras...un abrazo.

    ResponderEliminar